AutorNoelia García

Es claro el convencimiento del valor añadido que aporta a la Empresa trabajar la RESPONSABILIDAD SOCIAL EMPRESARIAL desde todos los ámbitos…que esté integrada en el ADN de esta, en todos los procesos y por consiguiente en todos los trabajadores.

Queremos dar un trabajo de calidad y para esto, entre otras cuestiones, queremos tener a los mejores trabajadores del sector.

El proceso de selección de personal en los últimos años va cambiando, en muchos sectores son los trabajadores los que eligen a la Empresa o, más bien, eligen con que Empresa NO quiere trabajar. Estos rasgos negativos, mayormente vienen dados por cuestiones Éticas, Sociales, Medioambientales… en resumen malas prácticas de Responsabilidad Social. Las nuevas generaciones tienen una cultura mucho mas critica y son muchos los que vetan sistemáticamente una Marca por malas prácticas en cualquier ámbito.

Esto nos lleva a preguntarnos, que imagen proyectamos al exterior, que valores transmitimos, que valores implementamos.

En resumen, si queremos ser competitivos volvamos a ver la ineludible obligación de seguir el camino “correcto”  porque los atajos nos influyen en cualquier índole del proceso Empresarial. La RSE está en la esencia de la Empresa.

Fissa Málaga, Gestión Integral de Servicios, S.A.

El pasado 14 de febrero se celebró en la sede de CEPYME la jornada La PYME en Europa,  en la que se contó con la participación de Ulrike Rabmer-Koller, presidenta de SMEunited, la patronal europea de las PYME.

Teniendo en cuenta que las PYME representan más del 98% de las empresas europeas, es importante conocer las demandas de las personas que representan a este colectivo.

La señora Rabmer-Koller destacó en primer lugar la necesidad de apoyo de las instituciones europeas, eliminando trámites burocráticos y facilitando la cualificación de los trabajadores para que se adapten a las necesidades reales de las empresas. Es decir que la oferta de empleo sea cubierta por personas que se adapten a los perfiles laborales requeridos.

Otro aspecto que la presidenta de SMEunited considera vital es el de la creación de un marco normativo que facilite la internacionalización de las empresas, realizando un acompañamiento de las empresas en su viaje al exterior.

Desde A2 Paneque Catalán estamos convencidas de que además es necesaria una formación sólida a personas emprendedoras y empresarios/as desde la perspectiva de la RSE y la Sostenibilidad, con ejemplos que se ajusten a los perfiles y necesidades reales de este colectivo.

A2 Paneque Catalán

Una interesante acción de Responsabilidad Social Empresarial, en beneficio de los empleados, es la formalización de convenios con otras organizaciones que inciden de manera diaria en su vida. Tener convenios, que se materializan en interesantes descuentos, con aseguradoras, ópticas, clínicas dentales, farmacias,…, además de suponer una clara ayuda, ofrece al empleado una imagen de que su empresa se preocupa por su bienestar, dándole facilidades para poder disfrutar de servicios que, de otra manera, repercutirían más negativamente en su bolsillo.

Debido a la necesaria incorporación de la mujer al mercado laboral, la acción que en este sentido cuenta con mayor popularidad, es el establecimiento de convenios con guarderías. Esta iniciativa es un gran impulso para la conciliación.

En un alineamiento con los ODS, podemos enmarcar estas acciones en:
– Objetivo 5: Lograr la igualdad entre los géneros y empoderar a todas las mujeres y las niñas.
– Objetivo 8: Promover el crecimiento económico sostenido, inclusivo y sostenible, el empleo pleno y productivo y el trabajo decente para todos.

Juan Antonio Campaña (ML Hoteles)

Fomentar el talento femenino

El pasado lunes 11 se celebró el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia 2019 con el que se pretende reconocer el rol que juegan las mujeres y las niñas en el campo de las ciencias y la tecnología.  Asimismo, esta semana se publicaba una noticia en la que, a pesar de que el porcentaje de mujeres con estudios universitarios es mayor que el de hombres, en el caso de las carreras relacionadas con Ciencia, Tecnología, Ingeniería o Matemáticas, el número de mujeres es más bajo.

Desde hace tiempo existen iniciativas en distintos ámbitos que ayudan a fomentar ese talento femenino. Así, por ejemplo, tenemos las iniciativas o proyectos STEM o STEAM (acrónimos en inglés de Science, Tecnology, Engineering, Art, Mathematics) en las que, desde la escuela, se intentan fomentar esa vocación de las niñas por las ciencias. Por otro lado, tenemos el día Internacional de las Niñas en las TIC promovido por los Estados Miembros de las UIT (Unión Internacional de Telecomunicaciones). (https://www.itu.int/es/ITU-D/Digital-Inclusion/Women-and-Girls/Girls-in-ICT-Portal/Pages/Portal.aspx). En el 2018 Ingenia organizó una jornada con talleres muy interesantes, impartidos por mujeres, sobre Internet seguro para niños.

Aunque se ha avanzado bastante, debemos combatir esa problemática con la ayuda de los distintos agentes implicados ya sean públicos o privados.

Ingenia

Debemos orientar las políticas de responsabilidad social corporativa de forma interna en las compañías, no solo hay que aplicarlas hacia fuera. El primer eslabón es el departamento de recursos humanos, encargado de hacer llegar la RSC a toda la compañía. ¿Cuáles son las actividades de RSC que se pueden implantar internamente en una empresa? Podemos hablar de igualdad salarial, eliminación del techo de cristal para la mujer, conciliación familiar, etc. Pero en el sector de recursos humanos queremos apostar por la evaluación del desempeño. Esta evaluación permite determinar la interacción de la organización para con sus propios/as trabajadores/as y clientes/as o proveedores/as, realizando un balance entre las necesidades tanto externas como internas.

Dentro de los objetivos de la evaluación se encuentra: el reconocimiento de méritos y resultados, corregir desviaciones y errores, tanto de comportamientos como de esos mismos resultados, detectar las fortalezas y debilidades de los/as individuos/as que participan, adecuar de forma eficaz a la persona con el puesto, descubrir las carencias formativas y cubrirlas, aumentar el compromiso, etc.

HRCS

Las grandes empresas a nivel internacional ya han empezado a virar a modelos de negocio más sostenibles, basados en tecnologías y energías más limpias. Estrategias empresariales más respetuosas, pero también más eficientes desde la métrica económica.

El desarrollo tecnológico en el parking automovilístico por ejemplo nos permite disponer de una oferta alternativa al diesel viable a corto plazo, como el Gas Licuado, los híbridos, el Gas Natural Comprimido o el licuado. Todos estos hidrocarburos alternativos gozan del beneplácito de emitir menos cantidad de partículas NOx y de un precio medio sensiblemente inferior al diesel o gasolina. De otra parte el transporte eléctrico gana confianza, seguridad y a medio plazo parece ser la opción a futuros.

Destacar, los proyectos en autoconsumo permitirán a las empresas alcanzar coberturas de autoabastecimiento solar próximas al 40% de la demanda eléctrica en la mayoría de ubicaciones. A la par que reducir la incertidumbre ante futuras subidas del mercado. Así mismo, cada kW que generamos nos permite liberar otros tantos kg de CO2 en la atmósfera.

Estamos ante una apuesta o modelo de negocio sin duda diferencial, que une valor añadido a través de la sostenibilidad y aumento de la competitividad a cambio de ahorro en costes. Proyectos con vocación a medio-largo plazo en los que la dirección de la empresa es clave a la hora de apostar por ellos.

Francisco Javier Carmona Rodríguez (Abasthosur)

El inicio de un nuevo año implica proponerse nuevas metas. Unos compromisos que se fijan con la premisa de contar con doce meses para poder llevarlos a cabo. Sin embargo, comenzamos 2019 con 17 compromisos en materia de Responsabilidad Social Corporativa ya establecidos: los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).

A primera vista puede resultar ambicioso pretender cumplir la propuesta completa de la agenda de desarrollo sostenible de Naciones Unidas, pero resulta sencillo identificarse con cada uno de los ODS. En primer lugar habría que comenzar por revisar los objetivos, estudiarlos y ver de qué manera podemos contribuir desde nuestra empresa o incluso en nuestra vida cotidiana para que se conviertan en una realidad.

Objetivos como el número 5, que propugna la Igualdad de Género, o el número 8, que aboga por el Trabajo Decente y la creación de empleos de calidad, o el 12, centrado en la Producción y Consumo Responsable, deberían darse ya por sentados en las empresas.

En Sando trabajamos por la implantación de cada uno ellos en nuestro día a día. Algunos se identifican plenamente con nuestra actividad, como el número 9, Industria, Innovación e Infraestructura, porque tal y como recoge las Naciones Unidas, para conseguir una economía robusta se necesitan inversiones en infraestructura (transporte, regadío, energía, tecnología de la información y las comunicaciones), indispensables para lograr un desarrollo sostenible y fomentar una mayor estabilidad.

Os proponemos iniciar el año examinando de nuevo los Objetivos de Desarrollo Sostenible y trabajar durante doce meses para que dejen de ser una meta y se hagan realidad.

SANDO

Existe un gran pudor por parte de las empresas a comunicar sus políticas de responsabilidad social por miedo a que sea interpretado como una campaña de marketing y relaciones públicas dirigida a redimir culpas por desarrollar un negocio que reporta riqueza a toda la sociedad.

Diferenciar una campaña de marketing solidario, que es una acción concreta, de lo que es la RSE como parte de la estrategia y cultura empresarial es el punto de partida. Y como tal debe ser conocida tanto por los integrantes de la empresa misma, como por la sociedad donde desarrolla su actividad (grupos de interés).

Comunicar es vincularse con la comunidad y dar a conocer la actividad empresarial que en ella se implanta para exigirse mutuamente la involucración en el desarrollo sostenible. Pero esta comunicación debe ser transparente, con hechos medibles y con ventajas cuantificables. Hasta para comunicar hay que ser responsable, no lo olvidemos.

Las políticas de RSE deberían ser un sello de distinción y una ventaja competitiva por encima de los costes añadidos que puedan llevar. En tanto que el consumidor informado debería elegir los productos y servicios que mejor colaboran con los ODS de la comunidad.

Estamos hablando tanto de la pequeña y mediana empresa como de las grandes corporaciones. Gran parte de los ODS se conforman con los pequeños gestos que hacemos a nivel personal, familiar, o de colectivos sociales, deportivos, culturales, etc. Y llevado a nuestro ámbito laboral contribuye a la concienciación de desarrollar medidas de mejoras sociales.

Autónomos, pequeños empresarios y empresas de mayor calado desarrollan acciones que ni siquiera son capaces de enmarcarlas como RSE, pero que lo son y le añaden ese valor social a su actividad. Pero también es cierto que podemos hacer más. ¿Cómo? Todos podemos:

• Reciclar, reducir y reutilizar.
• Disminuyendo nuestra huella de carbono haciendo un mejor uso de las energías.
• Eligiendo proveedores que a su vez controlen la procedencia de las materias primas.
• Proporcionando empleo que garantice el bienestar de los trabajadores.

Y si ya lo hacemos, ¿por qué no comunicarlo? Y como consumidor ¿por qué no exigirlo?

Es necesario promover la comunicación de estas políticas para poner en valor la elección del consumidor. Para que el consumidor sepa que, de manera indirecta, es parte de los ODS de su comunidad.

Comunicar para vincular empresa y sociedad para colaborar a que la ciudad sea un lugar más amable y habitable.

Carolina López (López Cano Restauración)